Entrando al fin de semana de acción de gracias en Estados Unidos encontramos el mercado de futuros de café del ICE en altos históricos por encima de 325 cts./lb, niveles que solo se vieron en 1977 durante una coyuntura complicadas en el aspecto macroeconómico y con problemas de clima severos en Brasil. La oferta y demanda del café no ha teniendo fluctuaciones extremas durante el presente año y el estimado de la cosecha de Brasil del próximo año a sido reducido levemente por el USDA la semana pasada, pero el principal acelerador de esta subida viene siendo las estúpidas medidas progresistas de políticos liberales de la Comunidad Europea (cuando no).
El requisito de la comunidad europea para la importación de alimentos denominado European Union Deforestation Free Regulation (EUDR), no es más que un mayor costo para los productores y la eliminación de muchos de ellos como participantes de las exportaciones a la Union europea. Políticos poniendo reglas sin sentido sin tener idea cuales pueden ser las consecuencias.
Si bien los altos niveles del mercado traen consigo mejores precios para el caficultor en el Perú estamos fuera de cosecha y con una cosecha 2024 muy mala el caficultor hoy no cuenta con café por vender. Lo que hay en el mercado en un 95% está en manos de especuladores y comerciantes. Por el bien de los caficultores, ojalá estos niveles de precio se mantengan durante la próxima cosecha que se inicia en mayo del 2025.
El problema es que, a diferencia de empresas como LUMIRIA (CAFE NOS), la gran mayoría de pequeños tostadores y cafeterías de especialidad que vienen apareciendo en nuestro país no tienen acceso a instrumentos de cobertura que les permita manejar su costo de insumo, lamentablemente muchos no aguantaran la presión del mercado, la falta de producto y los altos precios.
Si bien la UE anuncio que el torpe requerimiento que proponen ya no entrara en vigencia a inicios del 2025 sino en diciembre 2025, el mercado ya absorbió la noticia y al parecer tendremos precios altos por un tiempo, siempre dependiendo de cómo viene el clima en las zonas cafeteras de Brasil.
En resumen, estas son buenas noticias para el caficultor peruano para la cosecha 2025 pero el 2026 podría traer graves problemas ya que el 55% del café peruano va a Europa y se estima que el 60% de nuestros productores no podrá cumplir con la EUDR. Por eso, es sumamente importante el crecimiento del consumo local de café peruano durante el 2025, revertir esa catastrófica estadística que nos dice que en el Perú más del 50% del café que consumimos es importado y seguir creando cultura cafetera en el Perú a pesar de que muchos de los protagonistas que se esfuerzan y trabajan para ofrecer un mejor producto apoyando al caficultor no podrán soportar los altos precios del mercado.